Por un lado, se cumplieron 50 años del estreno - en EE. UU. - de la película Mary Poppins. Y, por otro, murió Peret.
Mary Poppins llegó a mi ciudad - Coruña - muchos años después. Recuerdo ir a verla, de niño, al Cine Colón. Me fascinó aquella institutriz voladora que tenía un novio deshollinador ( Dick Van Dyke ). La prodigiosa maestra era Julie Andrews. La película me encandiló ( a mi corta edad ) y fué muy galardonada, en su momento. Me quedé, para siempre, con su palabra mágica - Supercalifragilísticoespialidoso - y con su protagonista. Esta hizo , también, otra película ( The Sound of Music ) con un tema musical - My favorite things - que, en versión jazzistica de Coltrane, sería muy importante para mí en el futuro.
Por otro lado, murió Peret.
Peret estaba de moda cuando yo era un niño. Todavía recuerdo aquellos veranos, camino de la playa, con Peret sonando en el coche de mi padre. Recuerdo su éxito Una Lágrima cayó en la Arena. Recuerdo que yo esperaba que, en la playa, hubiera multitud de niñas llorando, esperando a que las consolara. Y recuerdo mi desilusión al comprobar que no era así. ¡ Ni había rastro de lágrimas !.
Pasado el tiempo, mucho tiempo, volvieron a rescatar a Peret. Fué a causa del escándalo Paesa ( oscuro tipo que había servido al CNI, en sus negocios sospechosos, y que, este, le hizo pasar por muerto para evitarle la cárcel. Hace pocos años se descubrió el pastel y comenzó a sonar, en la radio, el éxito de Peret El Muerto Vivo.
Todo esto vino a mi memoria ayer. Y tenía que contarlo.
Mary Poppins |
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