domingo, 26 de mayo de 2013

La Provincia de Lugo

 Salió, en su silla, al exterior. Como esta era eléctrica, y de ruedas, pudo ponerla a gran velocidad. Los trabajadores del centro lo observaron pasar, entre alarmados y divertidos. Dió varias vueltas al edificio hasta que, de repente, reparó en el paisaje. Se encontró rodeado de suaves  colinas verdes. Un paisaje que invitaba a la nostalgia. Nostalgia como la que sintió al recordar que, cuarenta años atrás, más avanzado el calor, vió un paisaje similar. Este era tan bonito como el que tenía ante sí. Aunque estaba varios kmts. al norte.
 La situación era distinta. Entonces era un niño de vacaciones, criado en la costa, que veraneaba allí por motivo del trabajo de su padre. Ahora era un señor, de casi cincuenta, jubilado por causas de salud. En estas reflexiones tristes estaba cuando recibió una llamada. Una llamada que le recordó que todavía tenía un futuro y que, ese futuro, estaría inevitable y felizmente ligado a la provincia de Lugo, y que -como decía Sinatra en su gran tema- Lo mejor estaba por llegar . No importa lo que, hasta ahora, hubiera sucedido.

Láncara, Lugo, vista desde el monte.


         

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