Ya hemos dado, en otra entrada, nuestro análisis de la guerra.Pero ahora nos detendremos en esta batalla.
Esta se desarrolló en Goose Green, el itsmo situado en el flanco izquierdo de la linea de avance británica hacia Port Stanley
Este itsmo une el norte y el sur de Isla Soledad, y, fortificada por los argentinos, constituía una amenaza para el avance británico. Los argentinos aprovecharon la, casi, veintena de edificios-escuela incluida-para atrincherarse allí. Por su estrechez era una posición muy fácil de defender y muy dificil de atacar, siendo imposible de flanquear.
Este itsmo era atravesado por un camino, que terminaba en Playa San Carlos.
En ese itsmo se encuentra, dominándolo, La Colina Darwin, donde estaba la vivienda del Director de The Falkland Islands Company, tomada como puesto de mando de la posición argentina- un aeroromo- defendida por la III Brigada de Infantería del Ejército Argentino. La posición estaba mandada por el coronel Piaggi, subordinado del gral. Parada.
Los argentinos, después de tomar la isla, reforzaron Goose Green con gran cantidad de efectivos, hasta alcanzar los 1500. Desplegados improvisadamente, manifestaron la ineptitud argentina de encara un ataque exterior-consecuencia de dedicar sus efectivos militares en conflictos internos, y no en defenderse de amenazas externas-.
Los británicos desembarcan el 21 de Mayo, en San Carlos y su jefe, el Brigadier Thompson, Jefe de la III Brigada de Marines, sugiere a la Primera Ministra, M. Thatcher, que abra negociaciones de paz con los argentinos. La orden de esta es tajante: Adelante. Tome Port. Stanley¡. Thompson mueve sus batallones hacia adelante y destaca al 2º de Paracaidistas para tomar Goose Green.
Al anochecer del 27 de Mayo, el 2º batallón del Regimiento Paracaidista (2 Para), alcanza la linea de partida para el ataque en Camilla Creek House. Horas después los argentinos son bombardeados desde un caza británico y el cañón de un buque. Los argentinos responden con fuego de Artillería de Campaña i Antiaérea. A las 0230 el Tcol. Jones ordena atacar, a sus 3 cías de fusiles-450 hombres-
La posición argentina se repliega, presa del pánico. Existen testimonios que cuentan como los oficiales argentinos dispararon sobre sus hombres, para evitar que se retiraran.La radio argentina se avería y no pueden mantener la coordinación de fuegos de apoyo.
No obstante, los servidores de ametralladoras pesadas argentinas-desde posiciones aisladas, mantienen a los británicos clavados en sus posiciones.
Pero, aún así, los británicos toman una posición argentina, que la sección del tte. Manresa debe, y lo hace, recuperar.
Las cías. B, C y D del 2º Para, intentan avanzar y son detenidas por la artillería argentina
A las 0930 la posición británica comienza a flaquear. Sobre todo la cía A.
El tte. Col. Jones ve esto y, dirigiendo personalmente la sección de mando de su bón, cargó colina arriba, para enardecer a sus hombres.Pero al cargar al frente de sus hombres, no ve una ametralladora argentina que queda a sus espaldas. Los servidores de esta lo ven y disparan sobre él. Alcanzado se levanta, para ser alcanzado nuevamente, esta vez mortalmente. La noticia de su muerte recorre la linea británica y enardece a su gente. Su segundo en el mando, el Mayor Keeble, ordena no parar el ataque. Las Cías B y D toman las últimas posiciones argentinas, en Boca House. La batalla de Goose Green había terminado, con victoria rotunda británica. Pero el Tte. Col. Jones, H, para sus hombres, había caído. En una reunión anterior, con sus oficiales, La única manera de mandar, para un oficial, es dando ejemplo, al frente de sus hombres.. Y llevó su máxima hasta el final, consiguiendo, a costa de su vida, convertir una previsible derrota en una incontestable victoria para las armas británicas.
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