Algunos emperadores romanos lo tomaron como referencia.
Su principal característica era su descomunal fuerza. Era el adalid de los dioses del Olimpo. Era orgulloso, valiente, ingenuo y muy sexual. Fué el patrón de Esparta y el héroe aqueo por excelencia.
Su principal hecho mitológico fué el de los doce trabajos.
Los relatos más antiguos escritos sobre él se remontan a Homero y Hesíodo. Su representación artística va desde el Templo de Apolo, en Delfos, hasta las magníficas obras del Museo del Prado.
Los griegos extendieron su culto a los etruscos y, estos, a Roma. Los romanos llevaron el nombre del héroe por todo el mundo por ellos conocido. Le dedicaron un faro en el Noroeste de Hispania ( actualmente La Coruña).
De bebé fué amamantado por Hera - de cuyo pecho surgió la Vía Lactea.
Al poco de nacer su madre envió dos serpientes a matarlo; el niño las estranguló y jugó con sus cadáveres.
Heracles creció sano y rebelde. Fué instruido en el arte musical.
En un ataque de locura mató a su mujer y a sus hijos. Fué condenado por Apolo a los 10 Trabajos programados por Euristeo. Heracles los hizo, pero Hera consiguió invalidar dos. Heracles tuvo que hacer dos más.
Estos fueron desde matar al león de Nemea a hacer lo mismo con el gigante Gerión.
Heracles, triunfante, viajó a la isla de Calidón. Allí conoció a Deyanira y se enamoró. Esta, loca de celos por la popularidad del héroe entre las mujeres, le hizo una túnica manchada con la sangre de un centauro - o sea, envenenada - que le produjo tal dolor que pidió a Yolao que lo matara. Este, para evitar el sufrimiento a su amigo, lo hizo. Deyanira, cuando se dió cuenta de lo que había hecho, se ahorcó.
Así el amor terminó con la vida del más famoso de los héroes griegos. Eso es lo que cuenta la leyenda........
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