Primeros días en Bergondo

Hace pocos días que llegué al Centro de Promoción de la Autonomía Personal de Bergondo. Hoy ha sido el primer día normal. Me explico. Por la mañana fui al médico, para pedir una revisión ocular —que ya se encuentra próxima—. Y, por eso, no pude hacer fisioterapia (todavía). Me acompañó Gloria —trabajadora del Centro— que se mostró, siempre encantadora (dijo que una sonrisa es, siempre, sanadora) y lo practicó. Luego comí y, desde las tres, estoy en clase de Informática. Mi profesor es Mauricio. Este joven y agradable tipo me tranquilizó (me agobié pues el curso termina en Diciembre y yo acabo de llegar. ¡Y ellos llevan desde Enero!). Otra que también me ayudó mucho, desde la distancia, fue mi maravillosa amiga, madrileña, Paloma. A ellos dedico este tema. A ellos y a mis ángeles de Bóveda