domingo, 10 de noviembre de 2013

Scorsese. El último Clásico

img-martin-scorsese_14532014334       Así, como suena. Es, quizás, el último-o por lo menos, de los últimos-cineasta cuya obra está abiertamente influenciada por los mejores clásicos.
  Otra gran influencia es su ciudad natal, la cinematográfica Nueva York.
  Allí, en el barrio de Queens, vino al mundo en el Otoño de 1942. Bautizado como Martin Charles Scorsese. en una iglesia católica de su barrio, creció en el seno de una familia de ascendencia italiana.
 Toda su obra está directamente influida por esa doble tradición familiar- la catòlica y la italiana-.
 De joven fué un fanático seguidor de The Rolling Stones y Bob Dylan- a los que dedicaría algunas de sus recientes obras documentales- Direction Home y Shine A Light, Estas obras le consagraron como lo que ya era- El referente cinemagráfico de su generación y de su tiempo.
 Pero, inicialmente, su vida iba por otro rumbo.
 Al principio, la influencia familiar  lo encaminó por la senda del seminario. Aunque el cine se cruzó en su camino´la huella- en temas como la culpa y la redención- en sus películas, del catolicismo es evidente. Como lo es su origen humilde. Su padre era planchador de pantalones.
 En 1964, el joven Martin se licencia  en Cine en la Universidad de Nueva York.
 Sus compañeros fueron Coppola, Spielberg,Lucas y De Palma, en su primer trabajo para los Estudios Harvey. Además De Palma le presentó a quien iba a ser su actor fetiche: De Niro.
 El director comenzó como montador del documental musical  Woodstock.
 Su primer trabajo como director de documentales fué en  Street Scenes, en 1970. Dos años después, y para el productor Roger Corman, dirige Boxcar Bertha
 Con de Niro , su gran amigo, hizo Malas Calles, película que los lanzó, a ambos, al estrellato,
 Pero Martin, eterno perfeccionista, no estaba satisfecho.
 En 1974 le consiguió el Oscar a Ellen Burstyn por Helena ya no vive aquí
  Su siguiente trabajo es un homenaje a sus raíces y se llama Italianamerican
 Pero será Taxi Driver, su obra maestra, el legado suyo a la historia del cine.. En ella brillan un consagrado de Niro- El Padrino II- y una joven- y prometedora - Jodie Foster.
 Con de Niro encara un proyecto atípico : el musical  New York. New York ( una declaración, musical, de amor al Jazz y a su ciudad natal- así como a la generación de sus padres-).
Pero Martin no escapó al lado oscuro que acompañò a su generaciòn: la cocaína.
 Su adicción le causó una profunda depresión de la que pudo escapar entregándose. apasionadamente. a la realizaciòn del documental musical  El Último Vals sobre un concierto de The Band.
 Ese mismo año dirige su gran èxito, American Boy
 Scorsese, legendario hipocondríaco. dirigiò - como si fuera su última obra . Toro Salvaje. Se trata de la biografía de otro mito italoamericano; el boxeador LaMotta. En la cinta colabora su guionista favorito, Schraeder..
 La pelìcula no fué el éxito esperado, pero 30 años después es un clásico indispensable.
 En los 80 escandalizó al mundo con La Ultima Tentación de Cristo, en la que rompió con su educación conservadoramente catòlica.
 Volvió, después, sobre la más remota historia de su ciudad natal. Con su fiel amigo, de Niro, vuelve a fracasar en El Rey de la Comedia.

En 1985 vuelve a su tema favorito y retrata los bajos fondos neoyorkinos en After Hours. Con la cinta triunfa en Cannes y salta a Europa
 Al año siguiente, con Newman y Cruise, hace El Color del Dinero- Secuela muy digna de El Buscavidas de Rossen. En Historias de Nueva York  dirige un mediometraje- Como Coppola y Allen -.
 En los 90 vuelve a Milán para rodar la biografía de Armani
 Con  Uno de los nuestros  da la campanada y pierde. injustamente, contra  Bailando con Lobos de Costner - aunque le consiguió el _Oscar a Pesci.
 Hizo, con de Niro, el remake Cabo del Miedo.
 En 1993 dirigió Day-Lewis y a Pfeiffer en la wartoniana cinta La Edad de la Inocencia. Tras esta fué comparado con el mismísimo Visconti. Esta obra maestra no gustó a los fanáticos del cine sobre la Mafia de Martin- entre los que me cuento, pero a mí sí que me gustó.
 A principios de la decada del 2000 nos vuelve a sorprender con El Aviador- una película sobre Hughes. Perdió, dignamente, en los Oscar, frente a  Eastwood.
 Francia le premió con la Legión de Honor. Ultimamente se ha consolidado como una de las leyendas vivas del cine universal.


                   

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