En Cataluña, y no sólo en Cataluña, la izquierda renunció a una idea propia de España aliándose con el separatismo más reaccionario y radical. Nacía una nueva versión del Nacionalcatolicismo. Esto coincidió, en el tiempo, con una nueva versión que se enseñaba - en las aulas - de la historia ( tan falsa como la franquista ) Si dabas otra que la politicamente correcta, no te metían en la cárcel, pero eras estigmatizado como facha. Eras un apestado.
En Cataluña - ya lo avisó el recientemente retornado Presidente de la Generalitat en el exilio, Tarradellas, todo estaba preparado para una dictadura blanca: la de los Pujol. Este incendiaba a las masas para tapar su corrupción. Y nadie se atrevía a meterse con él. Él era Cataluña ( ¿ les suena ? )
Por otra parte en España se iniciaba el proceso constituyente. La izquierda cedió, la derecha también. Había que evitar, a toda costa, otra guerra civil. La Transición fue posible
Los no nacionalistas cedieron. Había que crear Comunidades Autónomas para contentar a los nacionalistas. A cambio, estos, renunciaron a su independencia, de momento.
Pero, en Cataluña, Pujol fué sustituido, al frente del liderazgo nacionalista, por Puigdemont y Mas. Y, como en todos los procesos históricos subversivos, el radicalismo ganó a la moderación.
Por si fuera poco, apareció Junqueras. Y la calle - regada con gasolina - se incendió. Y, ahora, estamos como estamos. 40 años después.
Tarradellas y Suárez |
Pujol |
Puigdemont y Junqueras |
No hay comentarios:
Publicar un comentario