No consigue, con estos favores, la felicidad laboral que anhela.
Pero todo cambia cuando aparece,fortuitamente-Wilder es así- una chica tierna, sola y usada por sus ¨respetables¨jefes casados. Esta chica-Shirley MacLaine- va de relación en relación, que le dejan una huella imborrable en la mirada. Una mirada dulce y triste que-sólo los que la hemos encontrado en otros ojos sabemos cuanto atrapa. Pero resulta que es la amante de uno de los jerifaltes que usan el apartamento. Esa chica lo descolocará y lo cogerá en sus redes, enseñándole lo que es la verdadera felicidad. Esta cinta, de más de dos horas de duración, es una de las obras maestras del gran Wilder.
Premiada con 5 oscars- Película, Guión, Dirección Artística, Montaje y Dirección- es una muestra de este gran guionista que trabajó con los mejores directores y que, un día y por fortuna, decidió ser libre y pasarse a la dirección.
Un consejo. Si no la tiene ponga una Shirley MacLaine en su vida. Me lo agradecerá. Se lo digo porque yo, desde que tengo una, soy más feliz.
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