Mientras hago esta entrada estoy escuchando al gran Coltrane - My favorite things - Y lo hago para ponerme a tono y para inspirarme. También como tributo al autor, Manel R. Mantiñán ( al que me unen dos pasiones : La Coruña y el Jazz. En una descubrí al otro. Por eso este libro, Una declaración de amor, me ha entusiasmado. No formo parte de la generación - la suya - que descubrió, en los 60, el maravilloso mundo del Jazz. Yo lo hice posteriormente y gracias al cine. Por mucho que se critique el Cotton Club de Coppola nunca podré olvidar que fué esa película la que me presentó la música afroamericana. Eso fué hará unos 30 años. Por eso me identifico tanto con Mantiñán ( uno de los introductores del Jazz en La Coruña ) y con su libro, editado por la Diputación Provincial. No está a la venta y me lo consiguió Fina, una excompañera del Museo de Bellas Artes de La Coruña. Allí dió una conferencia Mantiñán y dejó varios de sus libros.
Esta obra nos habla del Jazz. Y lo hace de una forma bellísima y muy sentimental. Nos cuenta, en primera persona, la apasionada relación del autor con la música negra. Nos habla de muchos intérpretes que, además, son sus amigos. Nos descubre el lado más humano de estos mitos. Y nos lleva, de la mano, a escenarios míticos del Jazz coruñés como el Filloa,el Coliseum o el Auditorio.
Salas que, posteriormente, visité y llevo grabadas en mi memoria y en mi alma. Todo ello con una prosa notable, salpicada con una colección única de imàgenes del autor.
Aunque llegué tarde al Festival IInternacional de Jazz Cidade da Coruña, obra de Mantiñán, he podido disfrutar del mismo gracias a esta obra.
El gran Satchmo decía que el Jazz había que escucharlo con los pies - bailando - Pues Mantiñán acaba de demostrar que, también, puede escucharse con los ojos, leyendo. Leyendo libros como Vivir el Jazz de Manel R. Mantiñán
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