Artillería Naval es toda artillería utilizada en un buque de guerra. Está formada por el conjunto de bocas de fuego - cañones - fijadas en un buque y no portátiles.
Los chinos inventaron, en el Siglo XI, la pólvora y el hombre empezó a desarrollar todo tipo de ingenios que desembocaron en la invención del cañón.
En 1359 se produce el primer enfrentamiento de artillería naval entre aragoneses y castellanos, en el puerto de Barcelona.
El cañón - como protagonista central del enfrentamiento naval - se usa, en 1372, en el combate entre las escuadras inglesa y castellana.
A mediados del Siglo XV se funde el cañón en un sólo bloque. Se cargaba por la boca y se inicia la artillería de avancarga. Su uso se generaliza en las Marinas Europeas y Turca.
En el Siglo XVII Inglaterra, Francia, España y Holanda reglamentan el uso de piezas de artillería según el peso del proyectil a disparar.: cañón de batería de 40 libras, medio cañón de 23, cañón de 10
y cañón de 5.
La Artillería Naval cambió la Táctica del Abordaje hacia el combate a distancia. Esto tuvo especial importancia en la victoria inglesa sobre la llamada Armada Invencible Española, en 1588.
Esto cambió la configuración y tamaño de los buques.
La configuración de los cañones cambió al mutar las formaciones frontales por las laterales o de línea
En el Siglo XVIII algunos buques superaban los 100 cañones ( 50 por banda )
Los muñones del cañón se apoyaban en cureñas de madera, sobre cuatro ruedas. Mediante cuñas de madera se elevaba el cañón, apuntando por aproximación.
El cañón se sujetaba por un cable grueso, llamado braga. Así se evitaba o disminuía el efecto del retroceso en cada disparo.
El cañón se disparaba a través de aperturas en el casco del buque, llamadas portas o troneras
En el siglo XIX se reemplazaron los veleros por buques propulsados a motor.
La artillería también cambió.
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