viernes, 31 de mayo de 2024

HISTORIA DE UNA LEYENDA

Maqueta del Santísima Trinidad en el 
Museo Naval de Ferrol.

Si existe un navío en la historia naval española que es una leyenda ese es el Santísima Trinidad. Oficialmente Nuestra Señora de la Santísima Trinidad.

Conocido como el Escorial de los Mares, en su época fue el barco más grande y con mejor artillería. En principio montó 120 cañones, ampliados con 20 más antes de la batalla de Trafalgar. Tras la reforma de 1803, contó con 136 piezas. Antes de la famosa batalla embarcó cuatro obuses de a 4 libras. Esto dejó su artillería en 32 piezas de a 36 libras, 34 de a 24 lb, 36 de a 12 lb, 12 de a 8 lb, 16 obuses de a 24 lb, 4 de a 4 lb y 6 esmeriles.

Construido en La Habana con madera cubana, especialmente fuerte y flexible, entró en servicio como navío de línea de la Armada Española. Fue botado en marzo de 1769 y asignado en el mismo año. Desplazaba 4902 toneladas y medía de eslora (largo) 63,36 m., de manga (ancho) 16,67 m, de puntal 8,26 m. y de calado 8,5 m.

Se entregó con tres cubiertas, pero después de reformado contó con cuatro. Fue el único buque del mundo con esta característica. A su entrega su dotación estaba formada por 980 hombres. En la batalla del Cabo San Vicente participó con 1105 hombres y en la de Trafalgar con 1160.

En 1779 España entró en guerra con Gran Bretaña junto al aliado francés en apoyo a las colonias norteamericanas que luchaban por su independencia. En este buque fue donde se enarboló la insignia de la flota española. Tomó parte en las operaciones en el Canal de la Mancha y en 1780 participó en la captura de un convoy inglés de 55 buques. En 1782, con parte de la escuadra del Mediterráneo, participó en la batalla de cabo Espartel.

Una jornada funesta que precede al desastre de Trafalgar fue la del 14 de febrero de 1797. Al regreso del navío a Cádiz tuvo lugar la batalla de Cabo San Vicente. Después de cinco horas de combate bajo el fuego de varios navíos ingleses, el Trinidad se hallaba desmantelado, teniendo que transbordar el mando el teniente general José de Córdoba a la fragata Diana. Fue rescatado de una inminente captura por el navío Infante Don Pelayo, mandado por el capitán de navío Cayetano Valdés, que incluso llegó a amenazar al Santísima Trinidad con disparar sobre él si no volvía a izar el pabellón español. El Pelayo se interpuso entre la escuadra inglesa y el Santísima Trinidad hasta que se fueron incorporando a la batalla otros navíos españoles y consiguieron la retirada de las fuerzas británicas. 

Durante la noche la tripulación del Trinidad trabajó a destajo para intentar hacer navegable al destrozado navío y despejar la cubierta de los restos de la arboladura. Lanzaron al agua los escombros, asegurando los palos y tapando balazos para evitar que entrara el agua o, en todo caso, disminuir su volumen. Esa misma noche, la fragata Mercedes fue enviada por Córdoba para ayudar a remolcar el navío, operación difícil dado el pequeño volumen de dicha fragata frente al tamaño del Trinidad. 

Se ordenó al comandante de la Santísima Trinidad que pusiera el navío a salvo, en un peligroso viaje acompañado solamente de la fragata Mercedes. El día 15 amaneció el buque a cuatro leguas de Punta de la Piedad, divisando una escuadra británica de 22 velas que remontaba a cuatro navíos españoles capturados y a otros buques propios averiado. De ellos salieron dos en persecución de los españoles, pero al poco tiempo desistieron.

Como veremos más tarde, los ingleses no se olvidaron del Trinidad.

En la batalla de Trafalgar, bajo el mando del jefe de escuadra Baltasar Hidalgo de Cisneros y con Francisco Javier de Uriarte y Borja como capitán de bandera, ocasionó gravísimos daños al HMS Victory, aunque de esto no hablará la historiografía británica... Llegando a luchar solo con siete navíos ingleses, cuando fue capturado tenía a bordo 200 muertos y 100 heridos. No se fue a pique hasta que posteriormente se enfrentó con un temporal, que hizo estragos dado su mal estado, siendo destruido por los británicos a 25 millas al sur de Cádiz, llevándose con él a numerosos heridos. Los ingleses en venganza, no hicieron nada por rescatarlos y murieron ahogados. Collingwood, el segundo de Nelson, dijo esto de su hundimiento:

Empleamos el tiempo en destruir los presos entre Cádiz y Santa Lucía. A las 5:30 de la tarde acortamos las velas y tuvimos que enviar al lugarteniente Williams, el carpintero y sus 30 hombres sobre el Santísima Trinidad para destruirlo.

Este símbolo del poderío español en el mar siguió prestando servicios después de destrozado ya que sus piezas de artillería fueron rescatadas e instaladas en la entrada del Panteón de Marinos Ilustres frente a la Escuela de Suboficiales de la Armada en San Fernando.


Galdós, en su histórica colección de novelas Los episodios nacionales, embarca a Gabriel de Araceli en el Santísima Trinidad en la primera novela de la primera serie, que se titula Trafalgar. En esta obra maestra de la narrativa cuenta las vivencias de Gabriel desde los preparativos de la batalla hasta después del combate. Y da su visión de la batalla, los horrores de la misma y el rescate de los tripulantes. 

En el 2006 un barco mercante fue acondicionado externa e internamente como el Santísima Trinidad. Su conversión se inició en Galicia y se terminó en Algeciras. Esta réplica se amarró en el puerto de Málaga, donde funcionó como restaurante, discoteca y sala de exposiciones. Lo cual, dicho sea de paso, me parece una falta de respeto.

En 2011 este barco fue trasladado al puerto de Alicante, donde se planeó llevarlo a Ibiza en el 2016. En el 2017 fue retirado del muelle por problemas en el casco, estando actualmente sometido a reparación. 

Espero, por el bien de la memoria de los españoles caídos en Trafalgar, que la apertura al público para tan espúreos fines no se produzca nunca, dado que la tradición naval -tan poco respetada en nuestro país- merecía al menos que dicha nave alojara un museo sobre tan importante batalla y no una discoteca para ingleses borrachos. España, y no solo en este caso, tiene una historia tan rica como la que puede tener Gran Bretaña, aunque menos respetada. No nos podemos quejar si la historia de nuestras hazañas la escriben nuestros enemigos. Y, en la medida de lo posible, intentaré que no se ultraje la memoria de nuestros Caídos en Trafalgar con esta entrada en mi blog.

Para terminar, humildemente sugiero la idea de que, al igual que tenemos una fragata dedicada a nuestro héroe Blas de Lezo, dediquemos el siguiente buque insignia de nuestra flota el nombre del Santísima Trinidad.

miércoles, 29 de mayo de 2024

GATITOS Y MÀS GATITOS

       


Todo tiene que ser fácil, que no suponga leer nada si es posible, corto, en video, gracioso o de gatitos.

Esta es la explicación que me dio mi profesora de informática -y amiga- cuando me quejé de que las entradas en mi blog no tenían la repercusión que yo esperaba, sobre todo los relatos.

Dado que se trata de la reflexión de una mujer inteligente, la voy a tener en cuenta.

Por eso empiezo esta entrada con un corto de gatitos (que me ha pasado ella). Y la voy a terminar con otra animación de gatitos (los que me gustan a mí).

 No me digáis que no os produce ternura.



viernes, 24 de mayo de 2024

EN LA ARENA

 


Esta noche es la noche, el 2 de noviembre. Estamos en pleno otoño, caminando hacia el invierno. Tendré que volver a la playa, a la playa de Viveiro. Volveré a contemplar el lugar de la tragedia, la mayor tragedia naval de la historia de España.

La fragata Magdalena... 

Esta maravilla de la Real Armada española había sido construida en los Reales Astilleros de Esteiro, en Ferrol. Montaba 36 cañones y tenía una dotación de 480 hombres. Su misión era defender los puertos del Cantábrico de los franceses. 

Zarpó de La Coruña el 14 de octubre de 1810 y se unió, a la altura de Ribadeo, con una goleta y algunos cañoneros. Después de fondear en Gijón, desembarcó las fuerzas aliadas para atacar la ciudad, en manos francesas. A continuación se dirigió a Santoña y tuvo que enfrentarse a un fortísimo viento noroeste. Aquí perdió contacto con el resto de la escuadra. 

El 29 enfiló al puerto de Viveiro. Allí se topó con un terrible viento del norte. Pocos podían imaginar el destino que le aguardaba. Con el casco destrozado, el buque se fue a pique...

Aparte de algunas coplas y romances, mucha gente quiso olvidar la tragedia. Yo no.

Allí, cerca del mar, en esa playa, están enterrados los tripulantes de La Magdalena. Muchos han intentado encontrarlos, igual que el pecio, a pocos metros del arenal. Volveré a sentir la cercanía de la tripulación. Muchas veces he vuelto a ver la fantasmagórica silueta del barco, muchas veces he vuelto a oír en la playa la voz del capitán De Salcedo gritando desde la angustia:

- ¡¡Blas!! ¡¡Blas!! ¿Dónde estás?

A esa voz respondía otra:

- ¡¡Aquí, padre!!

El guardiamarina De Salcedo sabía que iba a morir y, antes de fallecer, quería asegurarse de que su padre sobreviviera.

Para los tripulantes de la fragata Magdalena el tiempo ya no pasa. Solo recordados por la Armada en la que sirvieron, se hacen compañía los unos a los otros sepultados bajo la arena. 

Esta noche seguramente volverá a desatarse una galerna como la que el diablo envió en aquella ocasión y yo caminaré sobre la arena, como hago siempre por estas fechas todos los años, recordando a mis camaradas. Eso me hará descansar en paz. Otro año.

Pero nunca verás mi rastro. No puedo profanar esta sagrada tumba.

Porque soy uno de ellos. Estoy muerto. Soy un muerto de la Magdalena. 

miércoles, 22 de mayo de 2024

EL PEOR ACCIDENTE DE LA HISTORIA NAVAL ESPAÑOLA

 

Maqueta de la fragata Magdalena en el Museo Exponav de Ferrol.

La fragata Magdalena fue la protagonista del peor accidente de la historia naval española. Pero, antes de desaparecer engullida por las aguas, tuvo una larga vida al servicio de la Real Armada Española.

Fue construida en 1773 en los Reales Astilleros de Esteiro (Ferrol) y armada con 38 cañones. Formó parte de la escuadra hispano-inglesa que fue puesta bajo el mando del Capitán Joaquín Zarauz. Su dotación al completo estaba formada por 480 hombres.

Su misión era, en el momento de la tragedia, la defensa de los puertos del Cantábrico de los ataques franceses. El corsario Insurgente, una balandra inglesa y veinte transportes de tropas completaban la escuadra aliada. Zarpan del puerto de La Coruña el 14 de octubre de 1810. El día 18 desembarcan las tropas, que, al día siguiente, atacan Gijón, que se encontraba en manos francesas.

Después de esto, el día 23 ponen rumbo a Santoña, encontrándose un fuerte viento. La Escuadra se dispersa y el viento amaina. La Magdalena aprovecha para buscar refugio en un puerto. Eligen Viveiro. Pero antes de llegar se vuelve a desatar un viento fortísimo.

La noche del 2 de noviembre un terrible oleaje destroza el casco de la fragata y esta se hunde. 

De los 480 hombres solo llegan tres a la playa. Dos fueron encontrados sobre la arena, muertos. Eran el Capitán de Navío Blas de Salcedo y su hijo Blas. Sus cadáveres fueron encontrados abrazados. 

A raíz de este hecho, se promulgó una Real Orden con la prohibición de que en el mismo barco embarcaran padres e hijos y hermanos con hermanos.

Monumento en recuerdo a las víctimas del naufragio de la fragata Magdalena.
Playa de Covas (Viveiro)


viernes, 17 de mayo de 2024

SAM, EL INSUMERGIBLE

Retrato de Sam en el
Museo Marítimo Nacional de Greenwich.

La historia del gato Sam, el insumergible, comienza en el Bismarck durante la Segunda Guerra Mundial. Sam es el nombre con el que fue conocido en la Royal Navy. Parece ser que el nombre anterior era Oskar y se lo puso la dotación del Acorazado alemán Bismarck, a cuyo hundimiento sobrevive. Solo se salvaron 118 de una tripulación de más de 2200 hombres.

Maqueta del Acorazado Bismarck
en el Museo Naval de Ferrol

A Oskar lo recogió el portaaviones británico HMS Cossack, que resultó hundido cerca de Gibraltar, a donde fue llevado el ahora conocido como Sam. Ya apodado "el insumergible", es trasferido al portaaviones HMS Ark Royal. Este navío también es atacado y se hunde cerca de Gibraltar, a donde vuelve Sam al ser rescatado una vez más de las aguas. Aquí termina su servicio en la armada británica. Fue devuelto a Irlanda del Norte, donde vivió en casa de un marinero retirado el resto de la guerra.

Murió cerca del mar, en los muelles de Belfast, en 1955.

miércoles, 15 de mayo de 2024

TAKE FIVE

 


Take five, grabada en 1959 en el álbum Time Out, es el tema de jazz más vendido de todos los tiempos. El título hace referencia al ritmo de esta composición musical del jazz clásico, pero también ha pasado a la historia como la expresión de tomar cinco minutos de pausa en el trabajo, en general, y también en el caso de los músicos durante la grabación e interpretación de dos temas.

Dave Brubeck fue un pianista y compositor de jazz (concretamente de Cool jazz) que vivió entre 1920 y 2012. Era estadounidense de origen judío. Su actividad jazzística empieza en 1940, pero saltó a la fama en 1951 cuando fundó el cuarteto que lleva su nombre. Los otros componentes eran Joe Morello (batería), Paul Desmond (saxo) y Eugene Wright (bajo). El cuarteto de Brubeck comienza su carrera en el pub Blackhawk de San Francisco.

El compositor del tema más famoso del grupo no es Brubeck, sino Desmond. Take five mantiene al grupo en el Olimpo del jazz durante las décadas de los sesenta y setenta. Brubeck se convirtió en un mito entre los aficionados al jazz, aunque fue rechazado por los puristas. Aparte de Cool jazz, dominaron el denominado jazz Costa Oeste (este tema es un típico ejemplo de este estilo) y el Jazz Tercera Corriente. Colaboró con leyendas como Jerry Mulligan y Chet Baker.

A mediados de los setenta, Brubeck disuelve el cuarteto para formar un grupo con tres de sus hijos. Con él versiona éxitos del cuarteto clásico e incluye temas nuevos.

Dave muere en 2012 entrando en la leyenda del jazz de todos los tiempos. Nos dejó un impresionante legado musical contenido en 46 álbumes.

viernes, 10 de mayo de 2024

LA TROMPETA CHINA EN LA MÚSICA CUBANA




La trompeta china es un instrumento esencial en la historia musical cubana. El suona -como era conocida- fue llevado a Cuba por los inmigrantes chinos durante la época colonial española. 

Todo empezó en el siglo XIX. Sobre 1837 llegaron los primeros culíes chinos para construir la que sería primera línea de ferrocarril española, en la entonces provincia de Cuba, entre La Habana y Güines (once años antes que la primera en la Península, que fue la de Barcelona a Mataró en 1848). Llegaron a ser 100.000 chinos en 1860.

Es parte fundamental en los conjuntos musicales del Carnaval, especialmente en Santiago de Cuba, donde se ha convertido en símbolo de los carnavales de la ciudad. La corneta china aporta una melodía distintiva para elevar el espíritu festivo y animar al publico a bailar y a celebrar. Este instrumento es una especie de oboe que lanza a la gente a la calle en el Carnaval y que suena junto a tambores y otros instrumentos. 

Es algo más que un instrumento musical propio de Santiago, es un emblema de identidad cultural. Sus intérpretes no suelen ser chinos sino que son casi exclusivamente negros de ascendencia africana. Lo que conocemos como Música Cubana dependió, desde un principio, de la mezcla de influencias españolas, chinas y africanas.

Otro producto de la mezcla de estas razas podemos verlo en la población cubana actual, sobre todo en las mujeres mulatas de ojos rasgados de una belleza espectacular.


                          

miércoles, 8 de mayo de 2024

TORROTITO Y UN AMIGO

 


Una cuestión previa: el torrotito, también llamada bandera de proa, tajamar o de bauprés, es una bandera que se iza en la proa de los buques de guerra en ocasiones solemnes. Cada cuadrante representa a uno de los reinos que dieron lugar a la Corona de España: Castilla, León, Aragón (que no Cataluña, que nunca fue un reino) y Navarra (representada por las cadenas, por la batalla de Navas de Tolosa).

Yo tengo uno, el que me regaló mi amigo Jacinto, al que la familia y los amigos conocemos como Cachi. Jacinto tiene el empleo (que así se conoce en el mundo militar su graduación) de Sargento Primero Señalero de la Armada. Yo lo conocí en el Museo Naval de Ferrol como guía, el mejor que he conocido. Está en situación de reserva activa, pero tiene a sus espaldas una gran y extensa carrera naval. Décadas de servicio activo. 

Hijo de marino, se alistó con 16 años en 1976. Ha estado destinado en destrucctores, fragatas, patrulleros y un remolcador, entre ellos la fragata Asturias y el remolcador Mahón (cuyo torrotito he tenido el honor que me regale). A él se lo había regalado el Capitán de Corbeta comandante de dicho remolcador.

Visitó todas las costas del mundo, excepto la rusa. Prestó servicio a bordo de un navío en las costas saharauis. Estuvo en las costas norteamericanas navegando con el entonces Príncipe Felipe, ahora rey Felipe VI. Mi amigo es también buceador de combate. Pasó a la reserva en 1995. Estuvo en varios destinos administrativos hasta que en el 2018 recaló en el Museo Naval de Ferrol. Este sargento primero se jubilará como Alférez de Navío.

De mirada sencilla y amable, no parece que se haya enfrentado a la muerte varias veces. Como buceador, por los peligros de trabajar en las profundidades y sufrir descompresión al subir. También durante el huracán Hortensia cuando tuvo que salir, pensando en que no iba a volver, a rescatar a unos náufragos enfrentándose a olas de impresionante altura. A este militar, al revés de lo que le pasa a otros, el valor no se le supone, lo ha demostrado. Es marino y no estaba dispuesto a desobedecer una orden aunque le pudiera costar la vida.

Como todo buen marino, tuvo un destino al que volver: su mujer y sus hijos, encantadores. Ellos también tienen mérito puesto que no es fácil ser familia de un marino embarcado.

Asisto con interés a todas sus visitas guiadas, en las que participa bastante gente. Teníais que ver con que atención y con que silencio atienden los visitantes sus explicaciones. Esto se debe a que no solo tiene grandes conocimientos sobre la Armada, Ferrol y las piezas expuestas en el Museo, sino que además explica todo de forma muy amena. Contagia su entusiasmo en las visitas y se nota que le apasiona lo que cuenta. Jamás he oído una pregunta del público que él no supiera responder. Oyendo sus disertaciones, me explico por qué el Almirante Jefe del Arsenal de Ferrol ha pedido que fuese él el que enseñe este Museo.

En fin, el torrotito de la imagen es, para mi, sagrado y será un gran recuerdo, no solo por haber sido usado por la Armada española sino por haber sido un regalo de un gran amigo. Cuando llegue al lugar que elija como residencia, lo enmarcaré como le prometí. Y al verlo, cada vez, me acordaré de este gran español, marino y amigo que será uno de los mejores recuerdos que me lleve de Ferrol. Seguro que en mis labios se dibujará una sonrisa de nostalgia y satisfacción por haber conocido a Jacinto, Sargento Primero Huete.

viernes, 3 de mayo de 2024

CRISTOBAL COLÓN

 


 

La fragata de las últimas entradas se llama Cristóbal Colón, como el marino que fue origen de todo. Cristóforo Colombo, según muchos historiadores, nació en la república de Génova el 31 de octubre de 1451 y murió en Valladolid el 20 de mayo de 1506. Fue un experto navegante, cartógrafo, almirante y gobernador de las Indias Occidentales. Estuvo al servicio de la corona de Castilla y de  los Reyes Católicos.

El 12 de octubre de 1492 descubrió América al llegar a la isla de Guanahani en Bahamas.

Efectuó cuatro viajes a las Indias, como se conocía entonces a América, conocido como Nuevo Mundo en Europa. Fue el primero que trazó la ruta de ida y vuelta por el Atlántico y dio a conocer la noticia. Esto fue decisivo para la expansión mundial de la cultura europea así como la conquista y colonización de América por parte de varias potencias del Viejo Continente.

Fue acusado de brutalidad en su periplo americano, pero otros historiadores niegan este extremo. La Corona de Castilla ordenó su arresto y expulsión a La Española en 1500, dadas las tensas relaciones con el navegante. Esto dio lugar a un largo litigio con sus herederos, que reclamaban lo que la corona les debía.

Su nombre inspiró denominaciones como la de Colombia y la Columbia Británica.

Este hombre sostuvo que se podía alcanzar el continente indio a través del océano por el oeste, sin saber que por el camino encontraría América, a la que denominó Las Indias. Fue el primero que facilitó el encuentro entre las civilizaciones europea y americana, lo que cambió la historia de la humanidad.

Aunque genovés de nacimiento, realizó esta hazaña para la corona de Castilla y Aragón, de cuya fusión resultaría la futura España. La Corona de Castilla era la encargada de todo lo concerniente al Océano Atlántico, así como la de Aragón lo era del Mediterráneo. Por se considera fundamental el apoyo de Isabel la Católica para esta expedición. 

América supuso un reto para Felipe II, ya rey de España y sucesor de los Reyes Católicos. Por eso se considera el proyecto americano  clave para la configuración del Proyecto Nacional Español.

Por todo lo dicho, tiene especial relevancia la figura de Cristóbal Colón para nuestra identidad nacional y tradición naval. Por eso la Armada española le ha prestado un nuevo homenaje dándole su nombre a una de las más modernas fragatas.

miércoles, 1 de mayo de 2024

MALA REPUTACIÓN

 


En algunos ambientes conviene cultivar la mala reputación, como reza el título de esta canción de Loquillo.

A veces es mejor ser apartado por los demás que no confundirse con la masa para ser aceptado. Hacer algo porque lo hace la mayoría es renunciar a la libertad personal. A ser uno mismo. Es sumirse en la soledad acompañada. La peor. Es ser desleal con la única persona con la que nunca debes serlo: contigo mismo.

Es pagar un precio demasiado alto para no estar solo. Sentirte solo. Siempre lo he pensado. Y la letra de esta canción me lo recuerda.

A veces la mala reputación es la mejor.