Australia

Hace pocos días, el director de este centro de Bóveda nos reunió para darnos una noticia demoledora. Luis, nuestro compañero, con el que yo había compartido mesa muchas veces, había muerto en un hospital de Vigo. La causa era una infección de orina que se complicó con una respiratoria. Me quedé estupefacto. El pudor de Luis le hizo inventarse un viaje a Australia para ocultar su hospitalización. Los últimos días yo no lo veía bien, pero lo achacaba a un estado anímico malo. Y es que Luis, desde hace 30 años no paró de sufrir. Por entonces era un joven Guardia Civil, con un año de servicio. Pero un accidente, como el relatado en la película ¨Mar Adentro¨le dejó tetrapléjico. Pero lejos de rendirse, desarrolló un sentido del humor ácido y genial, que le hizo célebre como su expresión de ¡Esa puerta¡, con la que protestaba, con una sonrisa irónica, a las auxiliares que dejaban abierta la cocina.
 Por eso me quedé estupefacto.Hasta tal punto que, otro de nuestros compañeros de mesa me vió y recomendó que lo imaginara en Australia, persiguiendo, en su silla, canguros y australianas en ¨top-less. Así lo haré. Nos veremos en Australia, amigo