La Orden General de Navegación y Combate de la Batalla de Lepanto fue dada por D. Juan de Austria, a la sazón Capitán General de la Santa Liga Cristiana, en el Puerto de Leguminizi el 9 de Septiembre de 1571. Ordenaba a la Flota viajar 20 O 30 por delante de La Armada. Esta avanzadilla estaba al mando de Fray Pedro Justiniano con seis galeras y dos galeotas.
Se ordena, también, a la Escuadra El Socorro de 29 galeras, al mando del Capitán General Cardona, ir en retaguardia recogiendo las galeras retrasadas.
Se ordenaba a toda La Armada se proveyese de abundante agua y que se ahorrase al máximo. Se le ordenaba aprovisionarse, a los buques, a una distancia de cinco o seis millas entre cada escuadra, con el fin de evitar aglomeraciones vulnerables al ataque turco.
La Escuadra de Vanguardia debería retrasarse a los lugares ordenados y acudir, enseguida, a los lugares determinados por D. Juan de Austria.
Con la batalla a punto de comenzar D. Juan se arrodilló y rezó pidiendo a Dios la victoria.
El mar, según testigos, se calmó y los turcos se vieron obligados a avanzar a remo.
La Armada Cristiana se puso en Orden de Combate y preparó su ala izquierda.
Los turcos dispararon un cañón, a modo de reto y Don Juan aceptó disparando otro.
La Armada Cristiana avanzó dos millas y algunos almirantes pidieron Consejo de Guerra.
D. Juan contestó con una frase histórica : no es hora ya de deliberaciones, sino de combatir.
Los Turcos estaban concentrados en Lepanto por orden de Alí.
Habían reunido 210 Galeras, 87 Galeotas y 120.000 soldados y marineros.
Sus cañones eran 750 menos que los cristianos y la escuadra otomana estaba dividida en cuatro cuerpos .dormados en media luna. Cuerpo Derecho, ( Siroco ), Centro ( Alí Bajá ), Tercero I<quierdo ( Cara Hodja ) y Escuadra de Reserva ( Dragut ).
Alí ordenó salir en busca de los Cristianos y entablar combate con ellos. Avistan a la Flota Cristiana y Alí ordena atacar.
La Flota de la Santa Liga atacó por la brecha que aparecía, ante ella, entre las Islas Kouhtsilaris y Oxía. Le seguía su Ala Derecha, dirigiéndose a mar abierto y al mando de Andrea Doria.
El Ala Izquierda , más cercana a la costa, se encontraba bajo el mando de Barbarigo.
La División de Reserva era dirigida por D. Alvaro de Bazán, rebasó Oxia por el Oeste.
El Marqués, al llegar, felicitó a Juan de Austria por haber encontrado al enemigo Turco.
Los cristianos, de repente, se encontraron con un cambio de dirección del viento que les benefició. Los Sacerdotes embarcados ( Franciscanos y Jesuitas ) atribuyeron ese cambio a una intervención divina.
Los Galeotes Cristianos fueron inútiles al ir mal armados. Los procedentes de Creta, Dalmacia y Jonia fueron una excepción.
Los Turcos tenían más bocas de fuego, astas y flechas.
Pero los Tercios Españoles embarcados eran más diestros en el combate.
Al principio el contingente naval al mando de Sirocco y de Alí rodea, por la izquierda, a la Flota Cristiana. Barbarigo les hace frente y es reforzado por el grupo napolitano - veneciano. Después acudirá en su ayuda la Flota de diez Galeras de Padilla.
Las Galeras procedentes de Dalmacia - Creta - Cefalonia frenan a las Galeras de Estambul.
Las Galeras ( en una de ellas iba Cervantes ) rodean a los Turcos y los atacan por la espalda.
La Galeaza de Bragadino ataca , y desordena la linea de Siria y Anatolia.
Las Galeras Napolitano - Venecianas, al mando de Quirini , derrotan al grupo turco que se encontraba frente a Rodas.
Las Galeazas de Pesaro y de Duodo rompen, por segunda vez, la linea Otomana.
Las naves capitanas de ambas Flotas son rodeadas por naves menores.
Se suceden los ataques y contraataques de los Tercios embarcados y los Jenízaros Turcos.
Cuando todo termina los Cristianos han perdido 12 Galeras y 7600 hombres ( 2.000 españoles ).
Hubo 14.000 heridos cristianos.
Se apresaron a los Turcos 170 Galeras y 20 Galeotas.
Se hicieron 5.000 prisioneros y 12.000 cautivos cristianos fueron liberados.
Entre 25.000 y 30.000 Turcos murieron en la Batalla.
La rotunda victoria Cristiana fue atribuida a la Virgen del Rosario por ser el primer Domingo de Octubre.
La Batalla supuso el primer desastre militar Otomano en más de 100 años y, de hecho, partió el Mediterráneo en dos partes: oriental, Otomana y Occidental, Cristiana.
La Batalla frenó, en seco, el avance Turco. Pero los Cristianos no llegaron a recuperar ningún territorio perdido antes de la Batalla.
No obstante fue una hazaña capitaneada por España; en la persona de Juan de Austria. Y, en conmemoración de ello, hago esta entrada.
