Mi estado reciente, que me ha sentado temporalme te en una silla de ruedas,me ha dado nuevas experiencias y tiempo para comentarlas con vosotros. Muchos piensan que la situación actual y su soluciòn es cosa de economistas. Yo creo que se equivocan pues, en todo caso, se trata de un asunto ciudadano a tratar con planteamientos filosòficos. aDebemos dilucidar, con urgencia, la sociedad que queremos y el papel que el estado debe jugar en ella.Yo creo que, en una sociedad madura, y conscientes de sus retos y responsabilidades, el estado debe llegar a donde la sociedad no puede por si misma.
Es absurdo que los discapacitados y los ancianos tengan que pagar pequeñas fortunas- si pueden, en el mejor de los casos- para ser maltratados por un personal escasísimo y desbordado por el trabajo mientras el estado malgasta sus recursos en ¨pagar¨favores a los amigos del poder subvencionando obras privadas a un coste superior de lo que resultarìa en manos públicas.
Tienes razón Leónidas, los geriátricos se convierten en negocios, todo es puñetero mercantilismo, personal insuficiente, y a menos personal, mas negocio. Pero, ¿dónde están las inspecciones que hace que pesonal no cualificado, puedan estar al frente de estas "instituciones", vamos.... por llamarlas de alguna forma.
ResponderEliminargracias, Egeria, A eso me referìa.Creo que la iniciativa privada es necesaria. Pero para los ciudadanos, le labor de inspección pùblica és irrenunciable para garantizar la igualdad de derecho Y el instrumento para ello es la ley y su estricta aplicaciòn.Esto diferencia una democracia real de un simulacro, como el nuestro
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