He de decir que, para mì, tienen gran valor todas. Y lo tienen porque por ellas sangraron nuestros abuelos. Y, algunas veces, envolvieron sus cadàveres. En todo caso merecen nuestro respeto. Nuestro respeto puès fueron el sìmbolo - ambas - de una España mejor que nos quisieron legar. Una herencia que estamos dilapidando a marchas forzadas.
Cada uno podemos tener nuestra bandera . ¡ Pero ¿¡ que es eso de menospreciar ( y, a veces insultar, las banderas por las que sangraron nuestros abuelos! ?. Esos que nos gritan, desde el màs allà, UNA GUERRA CIVIL NUNCA MÀS. ES LO PEOR QUE HAY, Y pobres de nosotros que no escuchemos su desesperada advertencia.
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