Me acabo de dar cuenta de que, con la última entrada, hemos alcanzado las cuatro mil de este blog. Echando la vista atrás, recuerdo que Termópilas 2013 empezó como Termópilas 2009 en julio de ese año. En todo este tiempo han pasado muchas cosas.
Primero me quedé en el paro, agoté la prestación y luego el subsidio. Me refugié para entretenerme en este blog, en el que publicaba cosas que me interesaban y donde descubrí mi afición por la escritura.
Después, en abril del 2012, sufrí un accidente cerebro-vascular cuando estaba consultando las posibilidades de encontrar un trabajo. El ACV me situó a las puertas de la muerte y me tuvo en coma un mes, del que salí no sin pagar un precio en hemiplejia, amnesia reciente y bruscos e inexplicables cambios de humor. Ahí ya nada fue igual: no podía andar y me di cuenta de que había olvidado las claves para entrar en el blog. Por eso, y haciéndome eco de las dificultades de retomar esta vía, abrí Termópilas 2013.
De La Coruña pasé a vivir a Ferrol. De aquí, por estar insatisfecho con el centro en el que estaba, me fui a Monforte. Allí tomé una decisión que cambió mi vida y me hizo más fuerte. No me encontraba bien allí y volví a Ferrol de nuevo, donde me encuentro ahora. Aquí he tenido la suerte de conocer a amigos, los de los tiempos difíciles (que son los verdaderos amigos). Nieves (mi profesora de informática, que me está ayudando a llevar esto adelante) y el samurai, su marido. También a Jacinto, guía del Museo Naval y miembro de la Armada.
En este momento estoy a punto de tomar una decisión importante, que ya veréis reflejada por aquí. Tome la decisión que tome, serán siempre mis amigos porque han estado ahí cuando lo necesité. Lo importante en la vida no es el camino que haces y lo difícil que pueda resultar, sino la gente que te ayuda a recorrerlo.
Por el camino han quedado amigos y otros afectos, ya sea por las circunstancias o por propia decisión, aunque no ha sido fácil asumirlo. Creo que tengo la obligación de dar un giro a mi vida. De todas formas, ocurra lo que ocurra, tenéis que saber que nunca dejaré de publicar entradas y compartirlas en facebook y otras redes sociales. Espero que sean comentadas, a favor o en contra, por todos vosotros. Pienso que las cosas, acompañadas de la crítica constructiva, se pueden mejorar.
No es este el momento de hablar de estos temas, sino de festejar con todos los seguidores que hayamos llegado a estas 4000 entradas. Y para celebrarlo, ahí queda la 4001, que os dedico. Va por todos vosotros, la familia de Termópilas 2013, los campeones.