jueves, 26 de mayo de 2022

IMAGEN CENTRAL DEL RETABLO DE LA IGLESIA DEL COLEGIO NUESTRA SEÑORA DE LA ANTIGUA DE MONFORTE

Teniendo en cuenta el testamento de D. Francisco de Moure, otrogado en fecha que se ignora, pero se sabe que con anterioridad al 12 de junio de 1636, unos once años después de haber comenzado con la construcción del retablo de Nª Sª de la Antigua, y en nuevo documento que parece recoger una nueva voluntad, otorgada con anterioridad oralmente, D. Francisco de Moure donó, al Colegio de la Compañía, la imagen de Nª Sª de la Antigua que a la sazón ya estaba terminada y probablemente instalada en su lugar. Prácticamente dicha donación suponía la renuncia a cobrar el trabajo realizado en la misma y de cara a sus herederos su voluntad de que no se incluyera en la tasación de bienes y obra que quedaba por cobrar. Incluimos aquí un fragmento del otorgamiento firmado en la fecha ya indicada de 1636. «… ahora para evitar diferencias, que se puedan tener entre sus herederos, aunque deja a sus testamentarios encargada no den lugar a dichas diferencias, en la mejor forma y manera que haya lugar de derecho, dona de nuevo ratificando la donación verbal a que se refiere, la dicha ymagen por ante mi scrivano y testigos, para que como lleva dicho se evite la diferencia que se pueda tener entre los dichos sus herederos cerca de dicha ymagen, o su precio si ha de entrar o no en el quinto de sus bienes, de que en dicho testamento tiene dispuesto; …»

martes, 24 de mayo de 2022

Escudo episcopal en el interior de la iglesia de Los Escolapios de Monforte de Lemos

Así encontramos escudos del cardenal como obispo, con el cordón que baja del capelo con tres borlas a cada lado. Estos escudos son ocho, cuatro están en las pechinas de la cúpula llevados por ángeles, obra de Francisco de Moure, otros dos en granito están en el propio presbiterio, uno a la izquierda sobre el sepulcro del Cardenal y otro a la derecha, sobre el cuadro de Nª Señora de la Antigua tras el que está el sepulcro de su madre la condesa de Lemos Beatriz de Castro “A Fermosa” (1480 – 1570). Los otros dos escudos, en nogal, coronan el retablo de Moure en el ático del mismo, uno a derecha y otro a la izquierda. Encontramos otro escudo, esta vez como arzobispo, es decir con capelo y cordón de cuatro borlas. Se halla en el claustro monumental, en el paño sur, haciendo juego con otros tres escudos: casa de Alba, en frente del escudo del Cardenal; Casa de Lemos al poniente y el escudo de la Orden de los PP. Escolapios a levante.Escudo episcopal en el interior de la iglesia..

lunes, 23 de mayo de 2022

Escudo Arzobispal de 4 borlas en el Claustro Monumental. Junto a estos, otro magnífico escudo, esta vez cardenalicio, con capelo y cordón de cinco borlas que se alza magníficamente tallado en la piedra granítica de la fachada sobre la puerta de la iglesia y bajo el imponente escudo del Rey Felipe III, rodeado con el toisón de oro con su vellocino colgante. Hay muchas preguntas sin responder ante esto. ¿a qué se debe que todos los escudos no sean los que le correspondían como cardenal.? ¿Esa distribución es intencionada? ¿Qué intención había tras la distribución? Yo pienso que el mensaje que quiso mandar el Cardenal Rodrigo de Castro es sencillo y simple y triple: Para la iglesia soy obispo – que es el mayor grado del orden sacerdotal- Por eso mismo los ocho escudos episcopales se encuentran dentro de la iglesia. Para el palacio soy arzobispo. El escudo arzobispal se encuentra en el claustro monumental, la zona de vivienda de la comunidad religiosa. Ya que ser Arzobispo no es más que un nombramiento de tipo administrativo-gerencial, un arzobispo no es más que “un coordinador de obispos”, pero ser arzobispo no suma nada a ser obispo en cuanto al sacramento del orden. Para el mundo soy cardenal. Por eso el único escudo cardenalicio aparece en la fachada, en el centro, bajo el del rey. Es un título principesco, un Cardenal es un funcionario de la Iglesia Católica, miembro del Colegio Cardenalicio del Vaticano. Su principal función, consiste en ayudar y aconsejar al Papa en sus decisiones y propósitos a cumplir. El título de Cardenal es impuesto solo por el Papa y representa una de las más altas investiduras en la iglesia católica apostólica y romana. La etimología de la palabra Cardenal nos describe perfectamente cuál es su función, pues proviene del latín “Cardo” que significa “Bisagra o Punto de apoyo“. El eje sobre el cual gira todo el peso. Nota: Quiero aclarar, a preguntas de un amigo, que ya estoy en Ferrol - hace meses. Lo que ocurre es que quiero publicar todas las fotos hechas en Monforte, antes de publicar las que haga aquí.

jueves, 19 de mayo de 2022

A partir de 1546, Rodrigo de Castro vivió bajo la protección de su hermano, Pedro, que había sido promovido al obispado de Salamanca y que en 1548 fue designado capellán del todavía príncipe Felipe. Esto permitió a Rodrigo de Castro formar parte del séquito del futuro monarca, que en aquel año inició un gran periplo triunfal por los territorios del Imperio. Volvió a acompañar a Felipe II en 1554, cuando viajo a Inglaterra, con motivo del matrimonio del Rey con la reina María Tudor. Al año siguiente marchó a Roma, comisionado —en calidad de secretario de la cifra— para ayudar a su otro hermano, Fernando Ruiz de Castro, marqués de Sarria, en su difícil pero exitosa embajada ante Paulo IV. En 1559, acreditado como hábil diplomático, regresó a España y recibió las órdenes sacerdotales en Cuenca. Poco después participó directamente, como consejero del Supremo Consejo de la Inquisición, en el largo proceso contra el arzobispo Carranza, arzobispo de Toledo. A finales de 1564, fue comisionado por Felipe II para gestionar en Roma la autorización que permitiera dictar la sentencia a la propia Inquisición. Tras varios meses de gestiones estériles, Rodrigo de Castro optó por sugerir una solución intermedia: el envío de un legado especial con amplios poderes, que sentenciara a Carranza en España. Sus buenos oficios resultaron determinantes para alcanzar la concordia otorgada en Elvas, en la víspera de Navidad de 1580. Poco después, Rodrigo fue propuesto para regir la archidiócesis de Sevilla; pero antes de posesionarse de la misma debió atender una nueva comisión real: recibir en Barcelona a la infanta María, viuda del emperador Maximiliano II, y acompañarla después hasta Lisboa, donde Felipe II había previsto esperarla. Tras cumplir el encargo, en el que invirtió buena parte del año, Rodrigo todavía permaneció en Lisboa por espacio de nueve meses, interviniendo como testigo al propio tiempo en el proceso que se le siguió a Antonio Pérez, antiguo secretario real. En el verano de 1598, Rodrigo de Castro se trasladó a la Corte, atendiendo a la llamada de Felipe II, quien falleció al poco de su llegada. En Madrid permaneció todavía varios meses y a comienzos de año se trasladó a Valencia, pues el difunto monarca le había comisionado para recibir en Vinaroz a la futura reina Margarita. El Cardenal de Castro regresó a Sevilla a mediados de mayo, el cardenal Rodrigo de Castro, cuya vida se apagaría al poco de su regreso a Sevilla, destacó como desprendido protector de literatos y artistas, pero su memoria pervivió sobre todo por sus gestos y fundaciones, todas generosamente dotadas. Son bien conocidas en Sevilla las del Recogimiento de niñas perdidas y la Limosna anual para presos pobres, así como el amparo que prestó a los colegios de San Hermenegildo y San Gregorio y a otras fundaciones jesuitas en Jerez y Écija. Pero más que éstas destacaron las que beneficiaron a su Monforte natal; aquí concluyó el convento franciscano fundado por su abuelo, el conde Rodrigo Osorio, y continuado por su madre, la condesa Beatriz, que falleció sin verlas rematadas. Conocido como del Cardenal—, que fue su gran proyecto y cuya gestión dejó confiada a la Compañía de Jesús. Falleció el 18 de septiembre de 1600. Fue enterrado en la catedral de Sevilla y posteriormente, en 1603, de acuerdo con lo expresado en su testamento, que había otorgado el 12 de agosto de 1598, sus restos fueron trasladados a la iglesia del colegio monfortino que había dejado fundado.

martes, 10 de mayo de 2022

"EL CRISTO QUE NO GUSTÓ A FELIPE II"

Escultura Santo Cristo. Artista: Valerio Cioli. Datado en 1529 - 1599. Autor también de las Estatuas de la Tumba de Miguel Ángel, el nombre y la fecha aparecen grabados en la parte inferior del paño de pureza de la imagen. El título es "El cristo que no gustó a Felipe II". Es de mármol de una sola pieza, excepto los brazos. Destaca en él la majestuosa y serena expresión de su rostro. Fue encargado por Felipe II para el Escorial (Madrid), pero no le gustó por considerarlo demasiado musculoso. Se lo regaló al cardenal con el que le unía una gran amistad. Este lo mandó traer a Monforte de Lemos. En su lugar Felipe II colocó otro Cristo de mármol, en este caso de Bemvenuto Cellini. Cristo que Cellini decidió ejecutar como cumplimiento de un voto inspirado de un sueño que tuvo en 1539, encontrándose preso en el castillo Sant'Angelo por orden del Papa Pablo III. Según cuenta el propio artista en sus memorias. Pasados 20 años el escultor se decidió a cumplir su promesa con la intención de que la escultura fuera puesta en su tumba. En 1576 el crucifijo fué regalado al rey Felipe II de España y enviado desde Florencia. Tras una restauración en 1994, el Cristo fué colocado en la capilla de los Doctores a los pies de la basílica, continuando púdicamente tapado con un paño.

lunes, 9 de mayo de 2022

San Francisco meditando sobre la muerte. Artista: el Greco. Datado entre 1594 - 1604. Es uno de los cuadros que se conservan en la pinacoteca de los Escolapios de Monforte junto con La aparición de la Virgen con el Niño a San Lorenzo. Los expertos lo consideran uno de los cuadros más bellos de El Greco en España. Fueron encargados por el Cardenal Rodrigo de Castro (de la Casa de Lemos y Fundador del Colegio de Nuestra Señora de la Antigua de Monforte). Es una de las mejores obras gallegas de El Greco.

jueves, 5 de mayo de 2022

Cuadro de San Lorenzo o Aparición de la Virgen con el niño a San Lorenzo. Artista: el Greco. Datado de entre el 1576 - 1604. DomenikosTheotokóppoulos, El Greco. nació en Candía en 1541. Marcó el final del Renacimiento con un estilo maduro muy personal. Nació en la actual Creta y murió en Toledo ( que está marcado por sus obras ) en 1614. Está enterrado en el Convento de Santo Domingo el Antiguo. Domeniko era católico. Con Jerónima de las Cuevas tuvo un hijo: Jorge Manuel. Algunas de sus maravillosas obras se encuentran en el Museo de los Escolapios de Monforte, donde las descubrí gracias a María, la Guía del Mismo. Se trata de un Oleo sobre Lienzo de estilo Manierista de 109 por 102 cm. Se puede contemplar, como hemos dicho, en el Colegio de Nuestra Señora de la Antigua de Monforte Su estilo evoca a Miguel Angel y a Tiziano y anticipa el Tenebrismo La obra fue encargada por Rodrigo de Castro, El Inquisidor

martes, 3 de mayo de 2022

Es el escudo real, se cree puede ser o de Felipe II o de Felipe III. Está en la fachada principal de los Escolapios (Santa María la Antigua) de Monforte de Lemos.

lunes, 2 de mayo de 2022

El Escorial Gallego Este edificio lo fundó el Cardenal Rodrigo de Castro, tío del Conde de Lemos bajo la orden de la Compañía de Jesús. Más tarde fue regentado por los PP Escolapios.