Vivimos una coyuntura política que,por su gravedad, pudiera parecernos nueva. Y digo pudiera pues considero a los seguidores de este blog, interesados en la historia. Y la historia es escuela de pueblos igual que la vida es escuela de personas. Y si algo tenemos en España es historia. Una larga, rica y, a menudo, trágica y sangrienta historia, a superar. Y esa es la cuestión, como aprender y superarla. A mi se me ocurren unas propuestas que someto a vuestra consideración.
En primer lugar-y hay que empezar la casa por los cimientos- debemos dar a nuestros niños y jóvenes un conocimiento de la historia alejado de maniqueísmos y banderias coyunturales, haciendo hincapié en lo que nos une, frente a lo que nos separa. Para ello es imprescindible devolver al ministerio de educación las competencias que hoy tienen las Comunidades Autónomas. Por otra parte convendría dar a la idea nacional un carácter popular, sacándola de los cuarteles y equiparando la Soberanía Nacional con la Popular.
Por otra parte se ha de dejar en manos de historiadores la investigación que está en manos políticas.Sería bueno, también, pasar la idea de España por la cabeza y no por el corazón-un nacionalismo no se combate con otro-.Otra medida que se me ocurre, esta para combatir la corrupción partidista, es la efectiva separación de poderes, quitándole al poder legislativo la facultad de elegir a miembros del CGPJ y al pte. del gobierno. Esto supondría, en la práctica´la separaciòn de poderes que,por independientes. podrìan vigilarse unos a otros.
En cuanto a la jefatura del Estado soy partidario de una república a imitaciòn de Francia, con un presidente elegido directamente por el pueblo. Se me podrìa argüir razones de tradición para mantener la monarquía´pero los siglos que van de Carlos III a Juan Carlos I desmontan esos argumentos.Además Francia ha demostrado que es posible una tradición nacional y republicana. Y el caso Urdangarìn lo hace imprescindible. Otro problema es la identificació de España con Castilla´dejando al margen bienes culturales tan importantes como el gallego , el euskera o el catalán, hecho al que han contribuido personajes tan dispares como Franco y Carod, pasando por Ortega. para los cuales la libertad individual les molesta.
Otro tema a abordar es la mayor implicaciòn de los ciudadanos en política¡ al margen de los partidos Pues si bien no hay democracia sin partidos, su mera existencia no nos hace libres. Esto se podría hacer por vìa de referendum o con la implicaciòn ciudadana a través de òrganos intermedios.
Otro problema casi tan grave como el nacional es el econòmico. Hemos vivido muchos años, junto con Europa, por encima de nuestras posibilidades. Y ahora hay que pagar. Debemos aprender. No podemos permitirnos la administración que tenemos. Tener una cultura propia no debe
conllevar una burocracia cara e ineficaz. No nos podemos permitir, en época de crisis´tener jubilados prematuros e improductivos vegetando y cobrando sin producir. Y,por último, debemos reducir los gastos militares no operativos al máximo-desfiles como el de ayer no tienen sentido, màxime cuando ya existe el del Dìa de las Fuerzas Armadas.
Estoy plenamente de acuerdo contigo. De hecho, creo que no solo tienen que revisar la historia los niños y jóvenes. Yo misma estoy intentado animarme a leer una nueva interpretación de la Historia de España (una visión general), escrita por José-Luis Martín, Carlos Martínez Shaw y dirigida por Javier Tusell. Es imprescindible saber para opinar. Besos.
ResponderEliminarYo también pienso lo mismo. La HISTORIA debe ser contada de manera objetiva, tal y como sucedieron los acontecimientos; no caben las interpretaciones personales teñidas siempre de tendencias políticas (como estamos viendo que sucede tan frecuentemente hoy en día).
ResponderEliminarQuerido Leónidas, me gusta esta entrada, pero hay propuestas que son utópicas, una que vez las competencias se trapasan a la CCAA dificilmente hay una marcha atrás, pero tampoco me importaría, siempre y cuando se respetara la pluralidad cultural e idiomática.
ResponderEliminarDe todas formas, me gustaría que ampliases las propuestas, en los que seguramente tengamos mas puntos de encuentros.
Soy la visitante 70.000, Hay premio?
ResponderEliminarAnònimo: Gracias por tu comentario. Yo me conformaría con que algunos no mintieran descaradamente.
ResponderEliminarEgeria: Gracias a tí. Si hay premio. Ya hablaremos...
ResponderEliminarLo único que puedo decir es cuanto me alegro de que vuelvas. Tq. Suca
ResponderEliminarEgeria:Te agradezco tu comentario.En cuanto al caràcter utópico del mismo....¡¿hay algo mas utópico que en 1939. con una guerra civil recién terminada y con media españa metiendo en campos de concentraciòn a la otra media, plantearse la reconciliación nacional?. Pues hay gente que lo hizo.
ResponderEliminar¡
Estoy tan de acuerdo contigo, que me atrevo a preguntarte algo que me interesa muchísimo. ¿Crees que la actual lucha que mantenemos algunos por conseguir un cambio que nos lleve a una política más razonable para los ciudadanos, es útil o estamos haciendo el bobo?
ResponderEliminarQuerida Paloma:Te responderè con palabras de Cervantes en ¨¨Ël Quijote¨¨:Nadie puede quitarnos la nobleza del empeño.
ResponderEliminarGracias Leonidas. Llevo toda mi vida en el empeño, pero a veces dudo, y no hay mejor manera de seguir adelante que con sabias frases como la que me acabas de recordar. Si es una locura o no es lo de menos.
ResponderEliminarEso mismo, eso mismo.
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